Sunday, May 31, 2009

Avances...

Buenas de nuevo.

Como se pierde un poco la prespectiva de tanto escribir y hacia donde vamos, os voy a poner una fotico de lo que hay hasta ahora, para que veais que todo tiene su recompensa:




Seguiré escribiendo.

Mástil V. Unión diapasón mástil.

Una vez que ya tenemos el diapasón casi en su estado final debemos pegarlo al mástil. Ahora es un buen momento para recordar que hay guitarras cuyo mástil es de una única pieza de madera, por lo que no se ha de pegar el diapasón, ya que la misma pieza hace de diapasón y de mástil. Este sistema se lo inventó Leo Fender en su afán de industrializar la guitarra, y realmente funciona.

Nosotros estamos haciendo un mástil de dos maderas, así que no nos queda más remedio que pegar.
Antes de pegar las dos partes tenéis que preparar las superficies de pegado, asegurándoos de que hagan el mejor contacto posible, a base de lijar, claro.
Cuando tengamos las superficies preparadas colocaremos el alma en el hueco del mástil y pondremos el pegamento sobre la superficie, ya sea cola blanca, epoxy o titebond. Lo importante es sujetar las piezas en su posición correcta, que habremos marcado previamente y con paciencia y muchos sargentos lo retendremos en su posición adecuada.
Para asegurarnos que la posición es adecuada, antes de colocar los sargentos, se puede clavar el diapasón con unos finos clavos, clavando sólo lo justo y necesario para que no se mueva, en el corte de los trastes o donde irán las incrustaciones. Una vez puesto los clavos,se quitan, se aplica el pegamento y se vuelve a clavar, se sujeta con sargentos y se sacan los clavos.
Es importante decidir si se va a usar esta técnica antes de realizar las incrustaciones, para aprovechar el hueco que estas dejan antes de instalarlas, ya que en el corte del traste es bastante complicado.

Hay fabricantes que ponen una madera fina cubriendo el alma, para evitar en lo posible que entre pegamento,lo que obliga a hacer el hueco del alma más profundo. En la práctica, con las presiones ejercidas por los sargentos el pegamento es expulsado hacia fuera, aunque siempre cabe la posibilidad de que caiga demasiado pegamento en el interior y nos inutilice el alma.

Es momento de dejar reposar 24 horas.

Friday, May 29, 2009

Mástil IV. El diapasón, incrustaciones.

Buenas a todos.

Os voy a contar cómo he realizado la incrustación del traste 12 del diapasón.

La técnica, contada, es sencilla, pero llevarla a la práctica es algo bastante complejo.

El material de incrustación más habitual es la madre perla, que es la concha cortado en piezas y pulida. También hay imitaciones sintéticas y piezas pequeñas pegadas sobre una base de resinas para obtener piezas más grandes que en la naturaleza no se encuetran o serían increiblemente caras. Otra opción a estos materiales es la madera,que sea dura y de poro cerrado, como el arce u otras maderas exóticas como el palo serpiente.

En cualquier caso, la técnica es la misma. Si eres un científico loco o conoces alguno puedes utilizar la Máquina del Rayo de la Muerte que se está construyendo para realizar los cortes en la pieza de incrustación y en el diapasón. Está técnica láser controlado por ordenador, es utilizada para incrustaciones muy complejas a realizar en poco tiempo, como bien estarás pensando esto es mucha pasta. Así que vamos a retroceder y a pensar como si la técnica no hubiese avanzado en los últimos 40 años.

¿Cómo se hacía este trabajo en los 60's?

Pues básicamente con mucha paciencia.
Una vez decidido el diseño de la pieza lo pasamos a papel y la pegamos sobre el material de incrustación, ya sea madre perla, madera o platino. Una vez bien seco, cortamos este patrón con una segeta, o mejor con una sierra de joyería. Esto requiere paciencia y habilidad. Una vez cortada la forma, podemos repasar el contorno con un minitaladro (tipo dremel) con una pieza de pulir piedra. Cuando tengamos la pieza cortada es el momento de transferir la forma al diapasón.

Una forma de hacerlo es sujetar la pieza en el lugar del diapasón deseado y repasar el contorno con un punzón para que quede marcado. Esta técinca, en maderas tan duras como el ébano, no funciona, y aunque consiguiesemos una buena marca, luego sería poco visible. Otra opción es pintar con un lápiz blanco. Mejor opción es pintar el lugar de la incrustación con un color de fuerte contraste con el diapasón, en mi caso he usado tempera amarilla, una vez seca procedemos como en el primer caso, rayamos la tempera con un punzón o útil similar, dejando una marca bien visible.

Ahora es el momento de darle caña a la Dremmel. Una vez que tenemos la figura trasferida al diapasón tenemos que retirar toda la madera sobrante para realizar la incrustación. ¿Cuánto hay que quitar?, justo lo necesario para que la pieza incrustado sobresalga ligeramente. Este es un proceso delicado y es mejor no tener prisa por terminar, he de decir que es complicado y a mano alzada casi imposible, por eso recomiendo una base para el minitaladro que permita regular la profundidad de crote. Muy útil y muy barato. Habrá puntos, si la figura es muy intrincada, que tendremos que terminar con un formón fino para las partes más complejas. Como veis es complicado y por eso, en los instrumentos más economicos lo que se suele hacer es un simple punto, cuyo agujero se hace con un taladro.
Un punto importante es no valorar una guitarra por estos adornos, si, son sólo adornos, y hay grandísimas guitarras con simples incrustaciones en punto, podeis consultar cualquier catálogo de Fender, en el que hay modelos de más de 6.000$ con "simples" puntos.
Para pegar la incrustación se suele utilizar un pegamento epoxídico de dos componentes. Suele venir en dos tubos que nos permite mezclar los dos componentes antes de aplicarlo. En este punto es donde viene el "truco". Como es imposible transferir de forma perfecta el patrón al diapasón con métodos manuales, lo que se hace es tintar este pegamento epoxy con el color de la madera, para así disimular los posibles fallos. En una buena incrustación el fallo será mínimo y por lo tanto el hueco a rellenar inapreciable, en uno malo, de cerca se verá mucho pegamento tintado.
La forma más fácil de tintar este pegamento es con el propio serrín de la madera del diapasón. Cuanto más fino mejor. Cuando mezclemos los dos componentes del pegamento echaremos este serrín, pero hay que asegurare que donde se mezcle esté limpio de cualquier suciedad, ya que esta también tintará el resultado. Una vez amasado el pegamento echaremos un poco dentro del hueco que hemos preparado, colocamos la pieza y la apretamos para que asiente.
Ahora es el momento de rellenar los posibles huecos creados por un mal corte de la figura sobre el diapasón.
No hay problema si la pasta de pegamento cae sobre la incrustación, ya que se lijará posteriormente.
Después de haber dejado secar durante 24 horas, lijamos hasta quitar el epoxy sobrante e igualamos la superficie de la incrustación con la madera del diapasón. En este punto podemos descubrir alguna burbuja o algún hueco entre el diapasón y la incrustación, con lo que habría que volver a rellenar con la pasta de pegamento y serrín y volver a lijar.


Recordad que esta técnica se puede utilizar para cualquier incrustación de la guitarra, por ejemplo, en la pala.

Es una tarea ardua, pero bien hecha, merece la pena.

Creo que eso es todo por ahora.

Saludos.

Monday, May 25, 2009

Mástil III. El diapasón, forma general.

Aquí andamos de nuevo.

Nos quedamos con todo el diapasón marcado, con su forma y la posición de los trastes.

Es hora de volver al trabajo duro.

En este punto es necesario que tengais en la mano los trastes que pensais instalar. Es necesario por dos motivos, la profundidad del corte depende del tamaño de la parte inferior del traste y la anchura del corte depende del ancho de este parte.

Para quien nunca se haya parado a pensar cómo es eso de los trastes he de decir que es una especie de alambre metálico, que se corta a la longitud deseada, según la anchura del traste con una forma un tanto especial, aqui podeis ver la forma. La parte superior es la que sobresale de la madera y es donde apoya la cuerda pulsada, hay muchos tipos y colores, para todos los gustos, cada fabricante usa uno diferente. La parte inferior se incrusta en la madera, tiene una sección principal, que es la que se introduce en el corte que nosotros haremos, y unas rebabas triangulares que sobresalen de esta sección central, incrustandose en la madera del diapasón.
Como veis es importante conocer la anchura de esta sección central, normalmente menos de 1 mm,para conseguir una sierra que haga cortes de este grosor y el traste encaje bien.
Yo recomiendo sierras japonesas, cortan en sentido contrario, es decir, cortan cuando atraemos la sierra hacia nosotros. De este modo la hoja de la sierra sufre menos presión, se dobla menos y es muchos más precisa, eso si, hay que practicar un poco para cogerle el truco, pero el resultado es impecable.

Suponiendo que tenemos una sierra adecuada, debemos cortar todos y cada undo de los trastes que hemos marcado. Podemos apoyar la sierra en una escuadra en el canto recto del diapasón o utilizar una ingletadora, más recomedable, o una ingletadora para trastes con tope de profundidad, mucho más recomendable. Es importante el tope de profundidad para no cortar más de la cuenta, la sección central del traste ha de apoyar en el fondo del corte, no puedes quedarte corto ya que si no, el traste no apoyaría en el diapasón, ni pasarte con la profundidad para que no quede hueco entre traste y diapasón. En este punto puedes ir verificando la profundidad con una tarjeta que quepa en el corte y donde hayas marcado la profundidad del traste.
Has de tener en cuenta que siempre se pierde un poco de profundidad en el lijado anterior a la inserción de los trastes, y más si el diapasón va a tener curvatura.

¿Pero no había que aplanar la tabla, de qué me hablas de curvarlo?

Pues si, la gran mayoría de los diapasones tienen una lijera curvatura, esto hace más cómodo para la anatomía humana tocar la guitarra. Hay algunos diapasones planos, otros de curvatura de 20" (pulgadas o 980 cm) que es casi plano hasta 9 o 7.5 pulgadas de algunas fenders antigüas. En mi caso he optado por 12"(352 cm). Existen también diapasones compuestos que según se van acercando a las posiciones altas, agudas, se van aplanando, lo que, en teoría, facilita la ejecución.
Después de cortar los trastes podemos darle forma al diapasón cortando lo que sobra por los laterales,por el principio y por el final. Como el corte no será perfecto, es mejor hacerlo 1 mm por fuera de la linea marcada y posteriormente ajustarlo a base de lijado.

Ahora es el momento de colocar los perfiles o bindings, que son unos simples adornos en los laterales del diapasón. Esto es totalmente opcional y es una cuestión estética, aunque algunos sostienen que protege al diapasón contra la humedad. Normalmente son de plástico y en las guitarras más exlusivas de algún tipo de madera exótica, podeis buscar fotos de Gibson Les Paul. Como mi guitarra va a ser muy exclusiva, yo los voy a poner de madera de mansonia africana.
Estas tiras de madera tienen un tamaño de 1 metro x 1cm x 2 mm. Cortas la longitud deseada y lo pegas, teniendo cuidado para que el pegamento utilizado, cola de carpintero en este caso, no se introduzca en los orificios de los trastes.
Una vez seco, se lija hasta nivelar las superficies. No es complicado y mejora visualmente el diapasón.
Tiene un serio inconveniente y es que complica mucho la posterior instalación de los trastes, pero eso ya lo explicaremos.
Hay algunos que prefieren colocar ahora los trastes y después instalar los perfiles, pero a mi me parece más difícil.

Antes de continuar se han de hacer las incrustaciones o inlays, pero estas son opcionales ya que, para referencia de trastes, se utilizan los puntos laterales. Es más una cuestión estética que otra cosa, eso si, una buenas incrustaciones hacen una guitarra mucho más llamativa. El trabajo es inmenso, sobre todo si se quiere un acabado perfecto, por eso solo las guitarras de alta gama lleva motivos complejos. De todos modos se ven guitarras de muy alta gama sin ningún tipo de incrustación, es una cuestión de gustos personales.

En la próxima entrega contaré una forma NO sencilla de hacer esto.

Bueno, ya hay curro para rato.

Saludos.

Thursday, May 21, 2009

Mástil II. El diapasón.

Buenas otra vez.

Siguiendo con el tema de hacernos un mástil de guitarra hoy comentaré con un poco
más de profundidad cómo hacerse un diapasón.

Básicamente existen dos métodos:

1.- Te lo compras en internet
2.- Sudas sangre y te lo curras tu todo.

Como yo soy un DIY extremo me decanto por la segunda opción. Esto te permite
hacerlo exactamente como quieras, escala deseada, y sobre todo, en tipos de madera
que no suelen venir de "fábrica", como pueda ser el peral, olivo o el más exótico cocobolo.

En su día ya comenté que lo primero que hay que hacer es dejar plana la tabla, con
un grosor aproximado de 7 mm. Si la madera la comprais en un almacen de madera esto
os lo pueden hacer por un módico precio y os aseguro que os ahorrais mucho curro.
A la hora de seleccionar la pieza que será el diapasón debeis tener en cuenta, primero,que tenga la longitud y anchuras deseados y segundo, que esté libre de defectos, agujeros, grietas o manchas de color que afeen la pieza. Este último punto puede resolverse,en algunas maderas, con tinte, pero yo prefiero que sea bonita tal cual.

Una vez con la pieza bajo el brazo y si no nos han nivelado la pieza y canteado
en el almacen de maderas, hemos de hacerlo nosotros, ¿cómo? con paciencia.
Podemos rebajar lo que nos sobre con una lijadora, primero 1 mm por un lado y luego otro por el otro lado, así hasta el grosor adecuaddo. Yo recomiendo que el último milímetro de cada lado lo repaseis con un sanding stick, que no es más que una pieza
de madera o metal, con una lado liso y mas grande que la pieza a aplanar, donde se
le pega una lija con cinta de doble cara. Con este utensilio repasamos las dos cara
y nos aseguramos de que queden bien lisas.
Al tener la tabla lisa ya podemos pasar a escuadrar uno de los lados.

¿Por qué sólo uno de los lados?

Porque el lado escuadrado será el que tomemos como referencia para los trastes, que irán perpendiculares a este lado, el otro lado, el no escuadrado, no nos importa, ya que cuando le demos la forma definitiva al diapasón este desaparecerá.
Ya tenemos la tabla preparada, y, como veis, nos podíamos haber ahorrado mucho curro
"desagradable" si esto nos lo hubieran hecho en el almacén de maderas. Vosotros decidies.

Ahora es el turno de marcar la posición de los trastes sobre el diapasón.

Para saber dónde se han de colocar los trastes debemos fijar la escala de la guitarra,
en mi caso he optado por 635 mm, entre Gibson, escala más corta y Fender, más larga.
Quien haya tocado estas dos guitarras habrá notado que la sensación de las cuerdas,
a igual grosor y afinación, no es el mismo, ni la distancia entre trastes, aunque esto
es más difícil de apreciar. Básicamente, a mayor escala, trastes más grandes y mayor
tensión de cuerda y viceversa. En definitiva, otra vez, cuestión de gustos.
Lo que si es muy importante es, una vez elegido la escala de guitarra, ser muy preciso
con la posición de los trastes, ya que un traste mal puesto lleva a una afinación incorrecta.
Para calcular la posición existe una fórmula matemática sencilla pero que no voy
a explicar. Es más útil utilizar internet y buscar un "online fret position calculator".
Una vez que tengamos los datos en la mano debemos transportarlos al diapasón.
Para ello utilizaremos una regla bien calibrada y un lápiz o portaminas de un color que sea
bien visible. En mi caso, blanco, buen contraste con el ébano negro. En este punto hemos de decidir
qué cara va a quedar arriba, es decir, cual es la cara vista, y que lado va a ser el principo,
cual va a ser el traste cero. Si no tiene ningún defecto estético claro, esto no tiene
mayor importancia, pero si tiene algún decoloración es el momento de elegir y dejarlo en
la parte de abajo.
Sabiendo en que cara van los traste y cual el el traste cero, nos disponemos a marcar todos
y cada uno de los trastes. Marcamos el traste cero más o menos donde queramos, este será nuestro punto de referencia y será donde esté la cejilla o el traste cero que algunas guitarras
tienen, como la Red Special de Brian May , donde apoyan las cuerdas al aire.
¿Es mejor un traste cero o una cejilla? pues la verdad es que la teoría dice que la cuerda al aire
en una guitarra sin traste cero suena diferente que cuando pulsamos sobre un traste, ya que la cuerda se apoya en un material diferente al del traste, cosa que no pasa en una con traste cero, ya que en este caso la cuerda, incluso al "aire", apoya sobre un traste. Nunca he tocado una con
traste cero, así que no pueddo confirmar empirícamente esta afirmación, pero que a mi me parece razonable.
Si alguien que lea esto y pueda aportar luz al tema, ya sabe, que escriba un comentario.
Bueno, volviendo a lo que nos incumbe. Debemos tomar como referencia este traste 0 ó posición de la cejuela para el resto de trastes. Colocaremos una regla apoyando en el borde del diapasón que hemos dejado escuadrado, fijamos la regla con cinta de doble cara o con lo que querais. Ahora, con mucho ojo marcamos la posición de todos los trastes, siempre medidos desde el traste cero, nunca con la diferencia de un traste a otro, que por qué, porque si los marcamos sólo con la diferencia entre trastes y nos equivocamos en uno, arrastraremos el error a todos los trastes posteriores.


¿Cuantos trastes he de marcar?

Pues eso depende de los que quieras o mejor dicho, de los que quieras y de los que sean tocables
en tu diseño de guitarra.
Puedes poner 27 trastes, pero si por diseño no se alcanza más de 24, es inútil y frustante para
el guitarrista ver esos traste que sólo son alcanzables haciendo contorsionismo. Por no hablar
lo que supone de trabajo un traste. Es mejor pensar en cuantos realmente vas a necesitar o se
van a poder tocar con tu diseño. Lo normal son 22 o 24, yo he optado por 22, así que marco hasta el traste 23. Siempre se marca un traste más ya que este es el final "natural" del diapasón.
Si quieres poner adornos de algún tipo tendras que alargarlo un poco, teniendo en cuenta lo
posición de la pastilla de graves.
Decidido que tenemos que marcar 23 trastes, con sumo cuidado transportamos las medidas calculadas al diapasón. Cuando tengamos las marcas con una escuadra hacemos unas líneas perpendiculares al lado que hemos dejado completamente recto, ¿la cosa empieza a tener sentido?.
Ya tenemos los trastes marcados, si quereis marcamos la forma del resto del diapasón,
así nos daremos cuenta de como va la cosa.
Para ello hay que definir la distancia entre la sexta y primera cuerda. Esto es una decisión
particular del guitarrista, pero 35 mm es un buen punto. Este será el ancho en la cejuela,
pero claro, si hacemos el mástil en este punto 35 mm de ancho, las cuerdas se nos saldrían por
los lateras, lo normal es sumar 2,5 o 3mm a cada lado de la primera y sexta cuerda. Supongamos 2,5,
sumado a 35 nos da 40 mm de anchura en la cejuela.
Ahora debemos calcular el punto más ancho del mástil, para ello necesitamos saber la distancia
entre la sexta y primera cuerda en el puente elegido y la escala de la guitarra.

Con esta fórmula lo tenemos:

D = distancia desde la cejilla o traste cero.
dc = distancia entre la sexta y primera cuerda en la cejilla
da = distancia añadida desde la sexta o primera cuerda hasta el borde del diapasón
B = distancia de la sexta y primera cuerda en el puente elegido
L = Escala de la guitarra

X = dc + 2Xda
Y = B + 2Xda
anchura = X + ( D * (Y-X) / L)

Con esto podemos tomar unas cuantas medidas sobre el diapasón y dibujar su forma.

Como habrás podido deducir estos cálculos se ha de hacer ANTES de tener la tabla que será
el diapasón, ya que nos podemos dar cuenta de que no es suficientemente ancha o larga, mala suerte.

Bueno, ya tenemos la forma que tendrá nuestro diapasón y como irán los trastes.

El resto, para otro día.

Wednesday, May 20, 2009

Mástil de guitarra

Buenas a todos.

Ya sé que empiezo un poco tarde a escribir, pero nunca es mal momento para echarse pa lante.

Siguiendo con mi tradición del DIY, os voy a mostrar como llevo el progreso de mi segunda guitarra.

Para esta primera entrada he elegido el mástil, parte fundamental de una guitarra. Ha de ser estable, cómodo (esto depende un poco del gusto de cada uno), sin puntos muertos en los trastes, y a ser posible, estéticamente agradable, otro punto muy personal.

El mástil más utilizado está compuesto de dos piezas de madera, el diapasón, la parte donde está los trastes y sobre los que reposarán las cuerdas, y el mástil como tal, que es el resto.
Para el diapasón se usan maderas bastante duras, como el ébano, palosanto, pau ferro, arce, y para el mástil se buscan madera relativamente duras, con buena resonancia y estables, como la caoba americana, usada por Gibson o el arce, utilizado por Fender.

Para mi mástil he elegido el ébano para el diapasón y arce para el mástil




En la foto vemos el ébano, madera negra, en bruto, así como el arce para el mástil sobre el resto de maderas que formarán el cuerpo de la guitarra.

Este mástil va a tener la pala inclinada, estilo Gibson. Un método para ahorrar un poco de madera es cortar la pala de la misma pieza, con el ángulo adecuada y pegarla dandole la vuelta, consiguiendo así el ángulo deseado:




Después de un buen secado tenemos que hacer el canal para el alma del mástil. El alma es una barra metálica que nos permite corregir cualquier curbatura producida en el mástil, por cambios de humedad, un golpe, etc. Este canal es fácil de hacer con una fresadora, haciendo unas cuantas pasadas, quitando como mucho 2mm de profunidad cada vez.

A continuación nos metemos con el diapasón. Si tienes una pieza en bruto como la de la foto, te toca currar un buen rato. Primero has de rebajar la pieza hasta unos 7mm de grosor, esto como puedas, a dentelladas, con las uñas, pero yo recomiendo una lijadora de este tipo . Cuidado que se come la madera muy rápido. Yo no tengo una, así que se puede hacer con una lijadora normal y mucha paciencia.

El siguiente paso es escuadrar uno de los lados para poder hacer el corte de los trastes, darle la forma definitiva al diapasón, realizar las incrustaciones, pegar al mástil, darle la forma al mástil, etc,etc pero creo que por ahora lo dejo aquí y ya seguiré contando mis peripecias otro día.
Os pongo una fotico con el estado actual del mástil, para que veais que me faltan muchas cosas por contar y por hacer.


Un saludo